La joyita secreta del año
PUNTAJE: 10
Históricamente, la cadena HBO siempre tuvo un as bajo la manga. Sin embargo, recientemente hubo dudas de que esto volviera a suceder, sobre todo tras el anuncio de las temporadas finales de Game of Thrones, y la indiferencia hacia las posibles continuaciones de True Detective y Vinyl. Pero todo esto se disipó con la genial aparición de The Night Of.
Cuando pocos lo esperaban, aparecía de manera anticipada un piloto de aproximadamente una hora y media que dejaría a varios televidentes más que sorprendidos. Es que esta potente miniserie de Steven Zaillian y Richard Price, remake de una serie británica Criminal Justice, daba la sensación, desde aquel primer episodio, de que vendría a asaltar todos los top ten del año con un policial brillante. A través de las semanas, la obra completa confirmaría ese gran nivel inicial para convertirse en una de las mejores series de la televisión estadounidense de los últimos años.
The Night Of es una serie compleja, que parte de un crimen para exponer ciertos motivos en una trama tan atrapante como perturbadora. La creación de Zaillian y Price se basa en particulares puntos clave, los cuales son la tensión y la duda, generando un clima donde lo abstracto está por encima de la idea y las acciones en sí. Esa adrenalina que se genera es producto de lo cinematográfico, de las posibilidades que brinda el universo audiovisual, ya que todo está narrado o inducido mediante la cámara y la magia del montaje. Lo que propone la serie es un maratónico recorrido que no da respiro. A través cada plano, detalle o lo que sucede fuera de campo, puede que haya una historia en sí. La obra es tan minuciosa que no deja tópico alguno de lado; en donde lo más mínimo puede ser más que trascendente y las múltiples posibilidades siempre serán lo que mantengan el hilo narrativo de esta atractiva serie.
Si bien las sensaciones que genera se encuentran un escalón arriba de la historia en sí, no hay que dejar de lado otro de los puntos altos de The Night Of: la composición de sus personajes, especialmente la de John Stone (un impecable John Turturro) y la de Nasir Khan (gran trabajo de Riz Ahmed), los cuales hacen que su trabajo corporal en escena se complemente con la tensión generada. Lo interesante de esto es que ese misterio o las dudas que se le puedan generar al espectador son las mismas que tienen los personajes en la ficción, ya que la tensión y la incertidumbre es tal que nadie sabe lo que pueda llegar a suceder.
Sin dudas The Night Of es una joya que cayó por sorpresa en este 2016, una miniserie impecable que se tenía guardada HBO –literalmente- ya que su realización se retrasó muchos años tras el fallecimiento de James Gandolfini, uno de sus productores, y quien iba a ser el protagonista. Tanto por su intensidad narrativa como por su belleza visual hacen que esta obra sea tan cinematográfica como un espectáculo televisivo brillante, donde a lo largo de los ocho episodios no hay ni una escena de más y semana tras semana dejaba un suspenso y una adrenalina pocas veces vista.