Segundas oportunidades
PUNTAJE: 6
La primera temporada de Love era bastante inconsistente, tal cual la relación amorosa entre Gus y Mickey (Paul Rust y Gillian Jacobs) en la ficción o en aquel intento de comedia romántica poco convencional creada por Judd Apatow, Lesley Arfin y el propio Rust.
El gran inconveniente de esta producción original de Netflix era su irregularidad, ya que por momentos daba indicios de poder llegar a exponer una historia interesante, pero luego decaía entre incoherencias narrativas y personajes que resultaban bastante insoportables.
A diferencia de la primera temporada, esta segunda entrega es mucho más amable, en principio porque resulta más fluida y con un hilo narrativo más sólido, en tanto que sus protagonistas no están en un tono tan negativo, y el universo generado por la serie se pone –por momentos- más agradable y atractivo. En este caso, lo principal no será el conflicto de personalidades o los desencuentros amorosos, sino la interesante osadía de cómo enfrentar esos inconvenientes y hacer del drama una comedia que mejora bastante conceptualmente.
Estos nuevos 12 episodios que ya se pueden ver en Netflix. Esta vez, la historia no se centra completamente entre los personajes interpretados por Rust y Jacobs, sino que también le da un lugar más interesante a sus pares secundarios, los cuales se muestran más complejos en su composición; el cuarto capítulo (“Shrooms”) es un claro ejemplo de eso y un entretenido intervalo entre los desencuentros amorosos que suele tener la pareja principal.
En conclusión, al estar más contenidos los protagonistas (más que nada Rust) y a pesar de tener varios altibajos (mayormente en los últimos episodios), esta segunda temporada de Love resulta mucho más atractiva que la primera. Entre diálogos ingeniosos y referencias culturales acordes, un interesante enfoque hacia la tecnología y las tendencias actuales, una muy buena banda sonora y una mayor estabilidad narrativa, esta nueva entrega es digna de que la serie merezca una segunda oportunidad, como la que se dan Gus y Mickey en la ficción. El destino de esta obra como el de la pareja se verá reflejado con el tiempo, aunque para eso habrá que esperar y ver como evoluciona, para lo cual seguro harán falta unos cuántos capítulos más.